
Torreón de la Dehesa Boyal de Torrejoncillo (Cáceres)
Cierto es que al igual que TTN, Radio Alfares nos hace pensar con sus temas en nuestra historia, este escrito que publicamos lo hemos recibido de Adesval que nos gustaría que leyeseis atentamente, y que tratabamos el sabado pasado en nuestra radio local.
Lo primero que habría que destacar de este edificio es su privilegiada localización. Sobre una suave elevación, ejercía un control visual en todas las direcciones. Lugar intermedio entre Portezuelo y Coria, parece probable que se trate de algún tipo de torre de observación, como parece indicar el propio nombre de la localidad (Torre pequeña). Desde este lugar se controlaba el paso de la vía de la Dalmacia por el desfiladero de Portezuelo. Esta edificación serviría para transmitir a la ciudad de Coria cualquier tipo de señales que se le hicieran desde Portezuelo, para avisar de movimientos de tropas enemigas o posibles ataques
Arquitectónicamente esta torre presenta dos fases. Una base de grandes sillares almohadillados que actuarían a modo de asiento sobre el que se levanta el cuerpo de la construcción. Esta parte superior está realizada con mampostería unida con gruesas juntas de cal, entre la que a menudo se incluyen fragmentos de ladrillo y teja a modo de calce. Esta técnica está muy presente en otras construcciones de la zona, entre ellas el castillo de Portezuelo.
En cuanto al origen de la edificación. Los restos visibles hoy, probablemente pertenezcan a una torre de vigía de época medieval, las similitudes en la fábrica con el castillo de Portezuelo y otros recintos así parecen indicarlo. Lo que si resulta obvio es su origen anterior. Las adecuadas características del emplazamiento no debieron pasar inadvertidas a nadie y romanos y moriscos se habrían asentado en el lugar. Por tanto, el origen de esta edificación bien pudiera ser romano, al menos así parecen serlo los grandes sillares que sirven de base al torreón. Sus grandes dimensiones y la perfección de la talla además de la presencia en estos bloques del almohadillado, técnica muy común en la construcción romana, así parecen confirmarlo.
Sobre si los bloques están in situ, es más difícil. Parece que están dispuestos en seco, es decir, sin ningún tipo de argamasa entre ellos, tal como solían colocarlos los romanos. Pueden ser bloques aprovechados de otra construcción o bien haberse construido sobre ellos. Personalmente me inclino por lo segundo. Parece más probable, que se hubiera aprovechado una construcción romana anterior, quizá un pequeño castellum o torreon de vigía romano.
Francisco Giral Royo. Arqueólogo Director de las Excavaciones del Castillo de Portezuelo (Cáceres). Año 2006
Datos recibidos de Adesval.